30 abr 2021

Nieves Concostrina descubre a grandes mujeres poderosas, sobresalientes, creadoras e inconformistas “tapadas por la historia”

Nieves Concostrina responde a Román Orozco y Juanjo Díaz-Portales

 

“Había científicos en el siglo XIX que decían que cuanto más estudiaba una mujer, más se le encogían los ovarios y eso era muy malo para parir. Es ridículo”

“Cuando una mujer llegaba a la Universidad, a los hombres se les ponían las orejas de punta: pensaban que perderían parcelas de poder”

Francisca de Pedraza, una huérfana de origen humilde, consiguió hace cuatro siglos (1624) la primera sentencia condenatoria contra su marido por malos tratos

Colombine fue la primera mujer en reivindicar el voto femenino. Organizó una manifestación en Madrid y la gente les gritaba en la calle “¡estáis locas”!


Las mujeres poderosas, sobresalientes, creadoras e inconformistas “tapadas por la historia” fueron las protagonistas de la intervención de Nieves Concostrina en la clausura del XIII Curso de la Escuela de Ciudadanía.

La intervención de la popular periodista en el espacio audiovisual emitido la noche del 30 de abril se centró en buena parte en la serie Pioneras (Movistar), estrenada recientemente. Concostrina es la conductora de la serie, detrás de la que hay un “gran equipo, con dos directores, guionistas, actores”, recalca la periodista.

A lo largo de su conversación con los periodistas Juanjo Díaz-Portales y Román Orozco, presidente y director de la EC respectivamente, Concostrina habló de algunas de esas pioneras que la sociedad patriarcal sepultó en el olvido. Este es un extracto de los temas que aparecen en los cuatro capítulos de la serie, con datos de las pioneras y los comentarios de Concostrina en la EC.

Desaparecidas de la historia: Luisa Roldan (1652-1706), la primera escultora registrada en el siglo XVII, tuvo que firmar mas de la mitad de sus obras con un simple “anónimo”. Su obra no llegó al Museo Nacional de Escultura hasta 2018, tres siglos después, Igual le pasó a Matilde Ulcelay (1912-2008), la primera licenciada en Arquitecta: no pudo firmar muchos de sus proyectos y fue represaliada por el franquismo por republicana.

Nieves Concostrina: No nos han contado que existieron esas personas. De las cuatro grandes protagonistas de la serie, yo conocía a una, Carmen de Burgos, Colombine, (1867-1932) por ser periodista, la primera corresponsal que hubo en España y cubrió guerras, como la de Melilla. ¡Y no se habla de ella en las facultades de Periodismo! O Dolors Aleu (1857-1913), la primera licenciada en Medicina en España. Tuvo que partirse la cara para ejercer. Adoro a esa mujer. No tenia ni idea de quién era.

Maternidad y Profesión: ¿Ser madre o seguir una carrera profesional? Carlota Pi, ingeniera electrónica, defiende que se hagan las dos cosas. María Jose Garrido, capitán de la Guardia Civil: “Pensé en un momento si invertir más en mi carrera o en mi familia (madre de dos hijos)”.

N.C. Si tienes una vida acomodada, se puede ser madre y ejercer una profesión. No tengo hijos. Creo que la maternidad está sobrevalorada. ¡Eso de que te metan en la cabeza que debes tener hijos! Me pone enferma lo de “se te va a pasar el arroz”. Somos mujeres libres y cada una opta libremente. Yo opté por mi carrera, el periodismo. Te han hecho creer que eres egoísta por no tener hijos. ¡Pues no, son opciones!

Estudios: Dolors Aleu: al principio, su padre no quería que estudiara. Le daba miedo. Iba a la Facultad de Medicina con escoltas. Ingeniera Carlota Pi, única mujer en su clase: “Los hombres se consideraban más inteligentes”. Arturo Álvarez a su mujer Colombine; “Qué cojones se te ha perdido a ti en la escuela”. Lita Cabellut (1961), pintora: “A las niñas no nos dejaban ir a la escuela, pero nos enseñaron a preparar a los niños para que fueran a la escuela ellos”.

N.C. En el momento en que la mujer estudiara, adquiría poder. Cuando una mujer llegaba a la Universidad, como la doctora Aleu, a los hombres se les ponían las orejas de punta. Dijeron: si ésta quiera ser médica, pronto habrá abogadas, juezas, arquitectas. Los hombres iban a ir perdiendo parcelas de poder. No nos veían que sumábamos para progresar, sino como una competencia que les restaba poder. Alfonso XII firmó una Real Orden prohibiendo a la mujer acceder a estudios superiores.

Independencia económica. Arquitecta Ulcelay: Monta su propio estudio en los años 50: “Hay que tener independencia económica, si no, no hay libertad”

N.C. La independencia económica es necesaria para hombres y mujeres, Te da la libertad de decidir. Mientras tengas que depender de la economía del de al lado, hombre o mujer, te van a impedir tomar tus propias decisiones.

Malos tratos. El marido de Colombine la maltrata. Abandona el hogar y se instala en Madrid, donde la insultan y atacan. Alguna prensa la llama puta y zorra. Pintora Cabellut: Retratista de la condición femenina, de los malos tratos. Su pintura refleja la injusticia, la ignorancia, la desigualdad, la brutalidad y los marginados: “Sobrevivir no es vivir”

N.C. Se ha avanzado mucho, pero aún queda un machismo instalado en hombres y en mujeres, Porque el machismo no es solo de hombres, ni el feminismo de mujeres. Feminista es cualquier persona de bien. Feminismo es la igualdad de derechos y oportunidades. ¿Qué persona decente no quiere eso? Los malos tratos siguen ahí y estamos pagando todavía el machismo incrustado en este país. Afortunadamente, España es uno de los países que más ha avanzado en la lucha contra la violencia de género.

Primera condena por malos tratos: La consigue Francisca de Pedraza, una huérfana de origen humilde, nacida en el siglo XVI. En 1624 consiguió una sentencia de separación matrimonial por los malos tratos recibidos de su marido.

N.C. Es una historia sorprendente, oculta durante siglos. Hasta que hace seis años, el profesor Ignacio Ruiz la descubrió en los archivos de la Universidad de Alcalá de Henares. Francisca no paraba de acudir a los tribunales. No le cabía un golpe más en su cuerpo. El marido la apuñaló un día en la calle, estando embarazada, porque tenía derecho a molerla a palos, por ser su marido. La justicia ordinaria le decía: haga usted el favor de no pegarle más. La justicia eclesiástica le decía: no es cristiano pegar a tu mujer, pégale un poquito menos… Todas sus sentencias eran a favor, pero nadie condenaba a quien la estaba matando a palos. Hasta que un juez de la jurisdicción universitaria de Alcalá emitió una sentencia en la que ordenaba la separación y una orden de alejamiento. ¡Esto se consigue en el siglo XVII! Pero esta mujer casi muere en el intento de conseguir el derecho judicial a separarse de un marido que la maltrataba, pero que estaba amparado por la justicia y sobre todo por la Iglesia. Seguimos en las mismas.

Cómo ven los hombres a la mujer. Dolors Aleu: “Los hombres miran con horror que las mujeres podamos tener una profesión”. Su marido la controlaba, tenía celos de que fuera más lista que él y que ganara más dinero. Al morir Dolors, el marido quemó sus trabajos y notas. El marido no permitió que ninguna de sus tres hijas estudiara, con lo que se produjo un retroceso. Su bisnieta dice en la serie: “Una mujer no puede nunca saber más que un hombre”. Un periódico de la época escribió: La emancipación de la mujer es una utopía, porque se opone a la naturaleza del hombre y la mujer. Renoir, pintor impresionistas francés siglo XIX: “las mujeres artistas son sencillamente ridículas”.

N.C. Es ridículo (risas). Es ridículo escuchar esas cosas. Había científicos en el siglo XIX que decían que cuanto más estudiaba una mujer, más se le encogían los ovarios y eso era muy malo para parir. ¡Me imagino que también pasaría con los hombres! Cuanto más estudiaran, más se le encogerían las criadillas, digo yo. Pero vamos avanzando. Yo, que siempre me estoy quejando de lo retrógrado que es este país, quiero mirar hacia adelante y pensar que estamos avanzando. Pero no hay que parar.

Cosas de mujeres. Augusto Suarez Figueroa, director de El Universal, contrató a Carmen de Burgos para escribir una columna en el periódico con el seudónimo de Colombine bajo el epígrafe de Lecturas para la mujer:  temas como los sombreros, la jardinería, la ceremonia del té… Colombine aprovechó la oportunidad y escribió sobre el voto femenino, la pena de muerte o el divorcio.

N.C. Colombine era absolutamente genial. Se dijo: voy a escribir sobre la mujer, la higiene, poner la mesa, la cosmética, pero entre col y col, metía lechuga. Inició el debate sobre el divorcio: hay que divorciarse, cuando no estas bien con alguien, y más si te maltrata, como era su caso. Hizo una encuesta entre los lectores y llegaron cientos y cientos de cartas a favor. Preguntó a los intelectuales del momento: Azorin le dijo “fíjese si estoy a favor, que no me he casado”; Pio Baroja, a favor, por supuesto; Unamuno, de derechas y católico, en contra. Además, Colombine fue la primera defensora del voto femenino. Antes que Clara Campoamor. En 1910 convocó una manifestación que terminó en el Congreso. Allí entregó a los diputados un decálogo en el que pedía el voto para la mujer; los diputados dijeron, lo vamos a tener en cuenta, y ahora váyanse a sus cocinas y a cambiar pañales. Algunas personas les gritaban al pasar: ¡estáis locas!

Política: republicanas. Muchas de estas pioneras se interesaron por la política. Algunas fueron de izquierdas y represaliadas. Colombine: “Muero contenta porque muero republicana”. Falleció en 1932, antes de que la República aprobara el divorcio. ¿Qué papel jugó la iglesia en el tema del voto femenino?

N.C. A la Iglesia le interesaba que no saliera adelante. En aquellos años, más de la mitad de las mujeres eran analfabetas. No tenían un pensamiento crítico. “Vas a hacer lo que te digan, no puedes pensar por tu cuenta; tú a los niños, a los cocidos y a misa”, esa era la doctrina. Las manejaban así. Las que pudieron estudiar, defendieron más sus derechos, lógicamente.

De Fernando VII a Juan Carlos I

Concostrina habló de otros temas en su intervención en la E.C. Estudiosa de la historia, aunque se reivindica como periodista, ha hecho popular su estilo de divulgar los hechos históricos con “rigor y con humor”.

Republicana de fuertes convicciones, crítica de la dinastía borbónica, tiene en Fernando VII uno de sus objetivos preferidos. En su libro Pretérito imperfecto, que va por la decimosexta edición, le llama: zopenco, pérfido Fernandito, mamandurrias, servil, pelota, adulador, rastrero, rufián, mastuerzo, mostrenco, ceporro…

Concostrina ríe al escuchar esa retahíla y añade más: “y abrazafarolas, aparcasofás, pisacharcos… José Mota, ese manchego genial lo resume diciendo: ‘tonto, que eres tonto; pero tonto del to, no tonto pa un rato, no, tonto pa siempre?. Más en serio, Concostrina añade que “Fernando VII nos hundió en la miseria”. Y destaca los valores que aportó José I Bonaparte, a pesar de la mala fama que le creó la España retrógrada: puso a estudiar a las niñas, quitó la educación de las manos de la Iglesia, creó los Liceos y los Ateneos, dio prioridad a la educación…

Defensora de la república, “que es sencillamente un sistema de gobierno, ni de izquierdas, ni de derechas, como la que hay en Italia o Francia”. Preguntada como resumiría el reinado de Juan Carlos I, responde escuetamente: “Corrupto. Como se ha demostrado”. Cree que los reyes han considerado España como “su empresa, su base de negocios”. “Mientras Alfonso XIII tenía sus dineros en bancos franceses, Juan Carlos I los tenía en Suiza”.

Televisiones municipales y redes sociales

El espacio audiovisual de la EC se grabó en los estudios de Manzanares10TV y se emite además por las televisiones municipales de Ciudad Real y Alcázar de San Juan, más Televaldepeñas, Azuer Televisión y diversas redes sociales.

En el XIII curso que se clausuró el 30 de abril, han intervenido siete destacadas personalidades: el economista José Carlos Díez, la escritora Marta Sanz, el cantante Miguel Ríos, el periodista Javier Ruiz, la jueza emérita Manuela Carmena, el presidente de honor de El País Juan Luis Cebrián y la periodista Nieves Concostrina. La EC es una asociación sociocultural independiente que cuenta con la colaboración del Ayuntamiento de Manzanares, la Diputación de Ciudad Real, la Fundación Unicaja y la Cadena SER.

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